El Abierto de Australia es el primer Grand Slam de la temporada 2021. Esperado por los fanáticos del tenis para ver a sus jugadores favoritos, hay varias bajas que han hecho que exista cierta preocupación incluso en la organización.

El primero que anunció que no iba a participar era Roger Federer, porque aún no estaba recuperado por completo de una lesión a la rodilla pero también fuentes especializadas señalan que se debe a la estricta cuarentena que iban a tener que cumplir, por lo que el factor familiar también influyó.

Otro gran nombre que no estará es Andy Murray, quien en enero dio positivo para Covid-19 y tampoco estará en el Grand Slam. ”Hemos estado en un diálogo constante para tratar de encontrar una solución que permitiera algún tipo de cuarentena viable, pero no ha funcionado”, dijo el tenista británico que ha disputado cinco finales en Australia pero no pudo ganar ninguna.

Hubo 15 vuelos chárter para Australia, específicamente a Melbourne o Adelaida, para luego guardar cuarentena antes de que el torneo empiece el 8 de febrero. Sin embargo, hubo varios problemas por estas estrictas normas.

Incomodidad de jugadores en Abierto de Australia

A pesar de que los jugadores pueden tener 5 horas al día para salir del hotel y entrenar, hubo problemas en varios de los vuelos. Hubo tres casos positivos en dos vuelos procedentes de Abu Dhabi y Los Ángeles. No eran jugadores sino alguien de la tripulación y otra persona que tiene que ver con la organización del torneo.

Esto hizo que 47 tenistas tuvieran que estar en cuarentena estricta: es decir, no podían salir de sus cuartos para entrenar y han tenido que ser creativos para mantener el físico y hacer algunos ejercicios específicos.

Uno de los jugadores que mostró su frustración fue el argentino Guido Pella, que tuvo que hacer una cuarentena estricta, pero también aprovechó para criticar la actitud de algunos de sus compañeros de la ATP. “Me extraña mucho el silencio de Rafael Nadal y Dominic Thiem, ellos en Adelaida, y nosotros en Melbourne con respecto a lo que está pasando acá. Yo no pongo las manos en el fuego por nadie, pero Djokovic, por lo menos, muestra intenciones”, indicó.

Los tres mejores del actual ranking se encuentra en Adelaida, donde además que pueden entrenar 5 horas, también han podido llevar un grupo más nutrido de preparadores e incluso sus habitaciones tienen balcones y el hotel cuenta con gimnasio.

Djokovic se pronunció al respecto y pidió llevar a los jugadores que estaban en estricta cuarentena a casas que cuenten con cancha de tenis para que puedan practicar pensando en lo que será este atípico primer Grand Slam del año.